Studia
Croatica – Historia 1960-2015
Vigésimo quinto aniversario de Studia
Croatica - Diciembre de 1984
Habló el presidente del Instituto y director de la
revista Studia Croatica Dr. Radovan Latković:
Nos hemos reunido aquí para evocar y analizar someramente
la labor que hemos cumplido en este cuarto de siglo y, lo que considero más
importante aún, vislumbrar las perspectivas que se nos presentan y los deberes
que nos impone el presente y el futuro próximo.
La idea de publicar una revista en español obedeció a la convicción de que
la difusión de la verdad sobre Croacia constituye uno de los importantes
factores en la lucha que lleva el pueblo croata por su libertad.
No pretendemos que con el solo esclarecer nuestra trayectoria histórica y
la actualidad política de Croacia, puedan solucionarse nuestros problemas
nacionales, pero creemos que un pueblo expuesto a toda clase de injusticias y
de discriminaciones tiene que reaccionar, defenderse, combatir las tesis
tergiversadas y afirmar las verdades.
Esta tarea constituye un elemento definido en el
engranaje complejo de la lucha libertadora de un pueblo. Nuestro grupo de
catorce exiliados croatas en Buenos Aires tuvo la audacia de lanzarse a esta
empresa que hoy cumple veinticinco años de labor ininterrumpida: la
constitución del Instituto Croata Latinoamericano de Cultura y la
fundación de Studia Croatica, revista de estudios politicos y
culturales.
Cabe destacar en esta oportunidad que los méritos por los logros obtenidos
se deben a la labor intensiva de todo el equipo de la redacción, principalmente
a nuestro primer director, Ivo Bogdan, renombrado periodista y analista
político croata y a su sucesor, Dr. Franjo Nevistić, figura de relevantes
valores intelectuales, al primer secretario de redacción Branko Kadić y a la
intensiva colaboración del Dr. Milan Blažeković.
Gracias a estos esfuerzos fue formándose paulatinamente en el transcurso
del tiempo un grupo notable que hoy alcanza a más de un centenar de
colaboradores, varios de ellos de renombre científico y literario, croatas y
extranjeros, de Argentina, Chile, Brasil, Venezuela, Colombia, Estados Unidos,
Canadá y de todos los principales países de Europa. Gracias a ellos hemos podido
cumplir con nuestro objetivo principal: explicar, afirmar y difundir la verdad
sobre Croacia."
Ahora, después de haber transitado brevemente el camino
de estos veinticinco años, quisiera referirme al presente que nos circunda y a
los deberes que nos impone.
Cuando empezamos a editar Studia Croatica, la
generación de los jóvenes nacidos en la Argentina de padres croatas, o llegados
a este país en los primeros años de su vida, acusaba recién los primeros
indicios de su formación. Hoy es una realidad. Ya no son chicos, ni
adolescentes. Hoy son ingenieros, médicos, abogados, economistas, licenciados
en distintas disciplinas, empresarios, ejecutivos, profesores universitarios,
en camino de ocupar posiciones de importancia en la sociedad argentina.
No podemos y no debemos omitir esta realidad porque, como
dijo el escritor Julián Marías, 'las falsedades siempre se pagan porque la
realidad siempre se venga, no se rinde'.
La realidad del surgimiento de esta nueva generación abre
sin lugar a dudas nuevas perspectivas y nuevos deberes en cuanto a nuestra
actividad.
¿En qué consiste lo específico de esta generación, lo que
debemos tener presente para que esta realidad no nos traicione, que 'no se
vengue' por tenerla incomprendida?
Considero que lo esencial de esta generación es la
bipolaridad de su identidad nacional. Son croatas por ascendencia, pero
argentinos por nacimiento, educación e integración social. Separar estos dos
elementos constitutivos de su individualidad sería no solamente erróneo, sino
pernicioso.
Estos dos elementos no están en conflicto entre sí, sino
que se complementan y aportan a su crecimiento y desarrollo armonioso. Lo
comprueban las colonias croatas dispersas en el mundo, acusando el valor de su
nueva identidad justamente en la equilibrada simbiosis de la cultura del nuevo
ambiente y la de sus raíces étnicas originarias.
Solamente como tales, como grupos étnicos croatas y no
como masa amorfa, étnicamente impersonalizada, hundida y desaparecida en las
sociedades adoptivas, estos grupos étnicos se han destacado y han encontrado el
reconocimiento de los más altos representantes de los países que los han
recibido.
A continuación el dr. Latković se dirigió expresamente a
los jóvenes argentinos croatas y dijo:
Vuestra generación tiene características similares a las
enunciadas y es llamada a realizar los mismos aportes a la sociedad argentina,
como tantas otras colonias croatas en el mundo. Vuestra generación demuestra su
disposición de hacerlo —de conservar y afirmar los valores étnicos de sus
antepasados— y de identificarse, como argentinos, con la lucha libertadora del
pueblo croata.
Esta disposición es la manifestación espontánea de
vuestro ser étnico heredado. Pero el crecimiento y la maduración del hombre y
de una generación se producen en base al esfuerzo propio adquiriendo, junto con
sus experiencias, el conocimiento de las cosas ya que el hombre, como nos enseña
Ortega y Gasset, no es determinado por su nacimiento, sino se desarrolla a sí
mismo, realiza un proyecto propio.
Volviendo al tema de vuestra generación, pienso que
vuestro dominio limitado del idioma croata constituye un obstáculo para la
conservación, el desarrollo normal y la afirmación del elemento croata en
vuestra identidad argentina. No quiero decir que ustedes en su mayoría no
hablen croata pero el idioma cotidiano difiere del idioma literario.
De las experiencias más inmediatas pude convencerme de
que este conocimiento en vuestra generación, con escasas excepciones, y
particularmente entre la gente más joven, es insuficiente para que puedan
servirse de los libros y de los periódicos croatas como fuente de saber y de
sentir croata, y más si se toma en cuenta que en los colegios y en las
universidades, donde se han formado, no recibieron ningún conocimiento básico
sobre Croacia.
Ahora yo me pregunto y quisiera que nos preguntáramos
todos:
¿Cómo es posible cultivar e inspirarse en el sentir
nacional croata sin conocer su historia, su cultura, su gente ilustre, sus
luchas, sus aciertos y desaciertos, "su destino trágico"?
¿Es posible —me pregunto— que ustedes puedan acrecentar
su sentir croata sin conocer, por ejemplo, el drama que viven sus contemporáneos
en su patria, condenados a las cárceles, expuestos a suplicios inhumanos, tan
conmovedoramente descritos en la protesta de los presos de Lepoglava dirigida
al Secretario General de las Naciones Unidas Pérez del Cuellar, protesta que no
podemos dejar de conocer y, más aún, que tendríamos que apoyar todos los
croatas en el mundo y en particular nosotros en América Latina?
Este vacío de información que, debido a vuestro
conocimiento limitado del idioma croata, amenaza la conservación y el
crecimiento del sentir croata dentro de vuestra formación de argentinos, puede
y debe ser suplido por Studia Croatica.
Creo que vuestra generación de argentinos de ascendencia
croata, como también en otros países de Latinoamérica habitados por nuestros
descendientes, puede y debe encontrar en Studia Croatica su revista, su
fuente de los auténticos y perdurables valores y anhelos del pueblo croata.
Esta perspectiva nos abre un nuevo e importante campo de
actividad: siguiendo con la línea establecida en los 25 años transcurridos en
la difusión de la verdad sobre Croacia a los pueblos de habla española, nos
sentimos llamados ahora a acercarnos a las nuevas generaciones croatas de
Latinoamérica, particularmente de la Argentina, para ir afirmando y desarrollando
su fondo étnico croata.
El disertante concluyó su exposición dirigiéndose a los
presentes en los siguientes términos:
Nos hemos reunido para evocar el vigésimo quinto
aniversario de la publicación continua de Studia Croatica, para destacar
los fines perseguidos y los resultados obtenidos. Pero pienso que lo más
importante es el hecho de que con los veinticinco años de labor cumplida no nos
hemos detenido sino que continuamos avanzando en el camino trazado y más aún,
abriéndonos hacia una nueva generación de nuestros descendientes.
Con alegría y optimismo puedo destacar que todo lo
expuesto sobre esta generación y las perspectivas vislumbradas no es fruto de
un análisis intelectual, de apreciaciones abstractas, sino el resultado de una
experiencia personalmente vivida, de contactos tomados con varios de sus
miembros que se han ya comprometido en una colaboración efectiva.
Después de la alocución pronunciada por el dr. Radovan
Latković, aceptada con viva aprobación, tomó la palabra el presidente del Club
Cultural Croata Argentino, el ing. Ante Turica, quien destacó la importancia de
la revista Studia Croatica y expresó la esperanza de que su misión
seguirá hasta el día en el que la Embajada de una Croacia independiente en
Buenos Aires tome a su cargo la tarea que cumple hoy Studia Croatica, de
representar a Croacia en la Argentina.
En este sentido hablaron luego el prof. Zvonko Mustapić en nombre del
Partido Campesino Croata y el dr. Ivo Korsky en nombre del Partido Republicano
Croata, expresando ambos su adhesión al acto y felicitando por la labor
cumplida durante los 25 años de la publicación de Studia Croatica.
anterior: http://historiadestudiacroatica.blogspot.com.ar/2015/08/studia-croatica-historia-1960-2015_12.html
siguiente: http://historiadestudiacroatica.blogspot.com.ar/2015/08/006-studia-croatica-historia-1960-2015.html
Copyright © All Rigths Reserved - Todos los derechos reservados - Sva prava pridržana
El magister José María –Joza– Vrljičak es el director de la revista Studia Croatica desde 1994.
No comments:
Post a Comment